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El sarro: cómo se forma y consejos para prevenirlo

6 Jul, 2015 | Sin categoría

paciente con sarro

Como ocurre con la caries, el sarro es uno de los elementos más comunes con los que tienen que lidiar los dentistas en la clínica dental. ¿Qué es el sarro? Es placa bacteriana de naturaleza calcárea que se caracteriza por su facilidad para quedarse pegada al esmalte de las piezas dentales y que se va endureciendo, aunque también puede fijarse en el borde de las encías o bajo las mismas. En este caso, provocará la irritación de los tejidos de la zona, pudiendo ser el germen de patologías, así como fomentar la aparición de caries.

La formación del sarro, también conocido como cálculo o tártaro dental, será un hecho si no tomamos las medidas adecuadas de higiene bucodental para eliminar la placa bacteriana que se genera con el consumo de alimentos y bebidas.

En un primer momento, esta placa es de color blanquecino y de carácter pegajoso. Pero si no se elimina, tiende a endurecerse, convirtiéndose en el mencionado sarro.

 

Doble problema: de salud y estético

El sarro es un problema de salud para la boca. Pero, además, es un elemento poco estético debido a su color amarillo o marrón, consecuencia directa de su composición mineral, y que suele ser visible para los demás al sonreír.

Para evitarlo, debemos proceder a limpiarnos los dientes de forma adecuada, en forma y frecuencia; incluso con un dentífrico antisarro. El uso habitual del hilo dental también ayuda a prevenir su aparición.

Otro factor a tener en cuenta es el alimenticio, ya que elementos con elevados índices de azúcar, exceso de ácidos o de grasas saturadas favorecen la presencia del sarro. También el café, el tabaco o el alcohol.

 

Cómo identificar el sarro

Se identifica claramente cuando se sitúa sobre las encías, pero no es tan sencillo en otras zonas de la boca casi inaccesibles o cuando se halla bajo la encía o entre los dientes. En este caso, lo mejor siempre son las revisiones en el dentista, que nos advertirá o no de su presencia, así sobre cómo eliminar el sarro, en su caso. Lo habitual es a través de una limpieza profesional.

El proceso de eliminación es conocido como raspado radicular. En el mismo, el odontólogo echa mano de instrumentos especiales capaces de retirar el sarro con facilidad, incluso el que ya presenta gran dureza. Además, el instrumental permite llegar a los lugares inaccesibles o poco visibles anteriormente señalados.

Aparte de la frecuencia y continuidad en la higiene de la boca, la presencia del sarro depende de las características de cada persona. Siempre es recomendable la visita al dentista cada seis meses, aproximadamente, para evitar que se acumule y, por ende, pueda propiciar algún problema mayor.

 

Fotografía: www.freedigitalphotos.net