La ortodoncia infantil es uno de los grandes interrogantes de los padres. ¿Cuándo es mejor? La mayoría espera a la dentición definitiva completa, que en general ocurre entre los 12 y los 14 años. A esas edades los dientes definitivos suelen haber erupcionado del todo salvo los terceros molares o muelas del juicio.
Pero en realidad, según recomienda la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO), lo mejor es que los niños tengan una primera visita con el ortodoncista a los 6 años. Aunque a esta edad es poco probable que tengan toda la dentición definitiva, es recomendable que se vaya evaluando como van creciendo los nuevos dientes. El ortodoncista evalúa no solo la posición dental, sino también el crecimiento de los huesos maxilares y de si la mordida (oclusión) es la adecuada.
Ortodoncia en adolescentes y niños
Se suele relacionar la ortodoncia más con los adolescentes que con los niños por que los primeros ya tienen los dientes definitivos, momento en el que corregir la alineación. Pero en ocasiones es mejor anticiparse y solucionar ciertos problemas antes para que después o sean menores o ni existan.
Tras la visita al ortodoncista a los 6 años, si está todo correcto, se recomendará un control cada 6-12 meses. En caso de que se perciban anomalías del crecimiento de los maxilares o una maloclusión, se recomienda solucionarlas cuanto antes. Esto se conoce como ortodoncia interceptiva.
A partir de los 6 años se puede someter a los más pequeños a un tratamiento de ortodoncia para resolver los problemas del crecimiento de los maxilares, expandir la arcada para ganar espacio y solucionar las maloclusiones.
Así, al solucionar estos problemas de forma temprana, si después de los 12 años se necesita un tratamiento de ortodoncia este será mucho más sencillo que si no se hubiera realizado una interceptiva antes.